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Loja, Loja, Ecuador
Esta es una iniciativa para, sin el afán de descalificar el nombre de Camilo Ponce Enríquez, elegir un nuevo nombre para el Aeropuerto de Loja.

¿Cuál debería ser el nuevo nombre para el aeropuerto de Loja?

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.Cúal debería ser el nuevo nombre para el aeropuerto de Loja?

jueves, 27 de diciembre de 2012

ALBERTO HIDALGO JARRIN, FUNDADOR DEL INGENIO MONTERREY

Hombre de origen humilde que desde temprana edad no tuvo ningún temor en enfrentar las dificultades de la época.
En lo físico era alto, delgado, trigueño, pelo negro que al principio se peinaba con raya en medio, ojos café. Trato cortés pero sin afectación, respetuoso, puntualísimo siempre y dueño de una seriedad a toda prueba, al punto que su palabra  fue considerada y aceptada por sobre cualquier documento.
Pese a no haber continuado sus estudios secundarios por la muerte de su padre, pero que gracias a su temperamento y actitud aguerrida logró emprender diversas actividades, entre las cuales estaban el transporte y el comercio de mercancias entre las provincias de Loja, El Oro y Guayas y el norte del Perú, pues comerciaba de los diferentes lugares, todos lo que la población necesitabä, desde artículos de primera necesidad como arroz y azúcar hasta barricas de vino blanco, calzado, chompas de cuero e infinidad de otros productos, e inclusive montó una agencia de bicicletas, así como alquiler y venta de vehiculos. En fin muy poco se quedaba fuera de sus lineas de negocio. 
Esa gran visión, espíritu emprendedor y aptitudes de trabajo,  le llevaron a incursionar en el manejo y negocio del ganado, y es así que por el año 1911, con apenas 15 años de edad logró un contrato con la compañía minera “South American” en Portovelo, provincia de El Oro, para la provisión diaria de carne para su campamento de 1.500 hombres. Empresa que disponía de los frigórificos requeridos, para este gran abastecimiento que representaba: largas jornadas de movilización con el cuidado y atención necesarias. A más del ganado de carne, proveía de hortalizas y legumbres, así como leche y derivados.
Con el tiempo llegaría a arrendar varias propiedades que le servían de tambos para el descanso del ganado. Entre ellas estuvo la antigua hacienda Trapichillo circundante al caserío de La Toma, que ocupaba un tercio del cálido valle del Río Catamayo y era de la familia Burneo.  Considerada tierra caliente donde abundaban los zancudos y con ellos la malaria. Por esto era por poco atractiva y nunca había servido para la ganadería o la agricultura, poseía agua suficiente pues era bañada por el Río Guayabal, tenía un trapiche pequeño para la molienda de caña y estaba situada a solo tres días de camino de Loja, lugar ideal para que el ganado se recupere.  

En l.925 adquirió gran parte de Trapichillo, drenó los pantanos para acabar con las pestes, diseñó y dirigió la construcción de canales de riego, inauguró una ganadería, que mas tarde sería de las más grandes del país y surgió la hacienda Monterrey. En los años 30 llegó a tener 600 hectáreas.
Otra de sus actividades fue concertar con la Dirección Nacional de Correos el servicio de transporte de la correspondencia y carga, valija postal, entre Guayaquil y Loja. En l.930, el mular era el único medio de viajar por aquellos peligrosos caminos de herradura, pero en l.935 comenzaron a construirse las carreteras y en l.939 ya representaba a la compañía CEDTA, cuya agencia funcionó en los bajos de su casa de la calle Diez de Agosto.  
En l.945 intentó fundar el Banco de Loja sin éxito, pero en l.948 desempeñó la Gerencia General de la recién creada sucursal del Banco Nacional de Fomento en Loja.  Asistió a la Feria Panamericana de Dallas y fue uno de los primeros ecuatorianos en importar ganado de casta. Llegaban las reses  por avión hasta Guayaquil y de allí eran embarcadas a Puerto Bolívar y despachadas en camiones a Monterrey, en el valle del Catamayo, donde había ampliado su propiedad inicial comprando La Viña, Alamala y Girón. En l.953 obtuvo una Medalla en la Feria Ganadera de Guayaquil. También era propietario de la hacienda La Ceiba frente al Perú. El 63 recibió el Premio al Mérito Ganadero que le confirió el Centro Agrícola Cantonal de Loja.  
En Diciembre del 58 publicó en el diario “La Opinión  del Sur” una invitación a todas las personas que quisieran  invertir su dinero, para que suscriban aportes  en su gran sueño, la constitución de la Compañía Industrial Azucarera, pero no obtuvo respuesta favorable. El 14 de Enero del año siguiente  surgió la empresa “Monterrey Azucarera Lojana S. A. - Malca.” con un capital de tres millones de sucres, para lo cual tuvo que vender unas 600 reses, sus haciendas La Ceiba y El Hato en Cayambe y una casa frente a la Alameda en Quito. En Agosto de 1.960, arriesgando todo su patrimonio a fin de hacer realidad su aspiración, adquirió en $ 175.000 (El dólar se cotizaba por entonces en el Ecuador a S/.18.), un equipo usado de fabricación de azúcar de procedencia inglesa, del Ingenio Buchitolo de Cali, para luego instalarlo en la hacienda Monterrey.  Fue una labor titánica que consistió en desmontar la maquinaria, embalar y transportar desde Cali a Buenaventura en camiones, de allí por mar hasta Puerto Bolívar, pero como las naves anclaban a dos kilómetros del muelle, se requirió de grúas especiales para el desembarco.  Desde el puerto, se embarcaron nuevamente en camiones que demoraban una semana hasta que arribaron a Catamayo y a partir de Octubre del 60, esta maquinaria fue instalada en Monterrey con el apoyo de su hijo Francisco y su sobrino Emiliano Gutiérrez y algunas decenas de hombres, en su mayoría procedentes de Portovelo, Zaruma y de otros lugares de la provincia de Loja. Todo este trabajo, con el asesoramiento técnico del Ingeniero Felipe Torres, de la compañía colombiana “Torres & Bou”.
 En mayo de 1962, después de tantos días y horas entregadas al trabajo, se hace realidad la producción del primer saco de azúcar que con fe y entrega, pone en alto a la Industria Lojana y que a su vez da trabajo a varios centenares de personas del Austro del País.
La noticia recorrió el valle del Catamayo y la gente fue a constatar la hazaña.  Desde Loja llegaban a comprobar el ¨milagro¨ producido. Una nueva esperanza para la débil economía del sur ecuatoriano, tan abandonado de los poderes públicos.  
El Centro Agrícola Cantonal le confirió la Medalla al Mérito  Industrial y Agrícola y la Municipalidad de Loja  lo declaró el Mejor Ciudadano.
  Una empresa de esta envergadura requería de nuevas inyecciones de dinero. Alberto Hidalgo logró un crédito de El Banco de Fomento, por varios millones de sucres. Además hubo que buscar financiamiento de otras fuentes que permitieron ampliar la capacidad productiva y en Marzo del 64 se exportó a Chile 11.000 quintales de esta nueva azúcar. 
 Nunca aspiró a ocupar cargos públicos ni los aceptó cuando se los ofrecieron. En su hacienda fue un excelente anfitrión que acostumbraba recibir a Presidentes o autoridades de la República cuando arribaban a Loja. Trabajador incansable, tuvo visión, carácter y fortaleza para los negocios, con sus trabajadores usó la disciplina y el ejemplo que siempre han sido las bases de toda empresa, como ecuatoriano creyó en el futuro de  Loja y luchó por el engrandecimiento de la provincia.
 No habian pasado 2 años desde el inicio de operaciones del ingenio Monterrey, cuando en su último viaje a Quito, con el fin de obtener fondos para capital de operación, tuvo un paro cardíaco el 21 de abril de 1964.  Dejó de existir quién fue un verdadero hombre que retó al futuro y que se adelantó a cualquier persona de su época, dejando el más grande legado con una actividad progresista, generadora de fuentes de trabajo y riqueza,  no solo para su familia sino para la población de Catamayo y para todo el sur del país.
 Han transcurrido más de 50 años desde la creación del ingenio Monterrey, con logros sostenidos y mejoramiento de la producción agrícola, industrial así como económico, sin que hasta el momento exista otro personaje como lo es Don ALBERTO HIDALGO JARRIN y lo que este nombre significa para LOJA y el país.

miércoles, 12 de diciembre de 2012

Sergio Romero Witt

Su vocación desde que tuvo uso de razón fue la aviación, alrededor de esta actividad profesional giró con devoción y dedicación el sueño de su vida.  Heroico, valiente y gran piloto, su actitud profesional no quedó circunscrita solamente en conducir una nave aérea.  Fue más allá.  Quiso actuar y así lo hizo, con grandes sacrificios, con sentido de ecuatorianidad y patriotismo ilimitado constituyó “Aerolíneas Cóndor” para servir a las provincias de la Región Sur y Oriental e integrarlas al resto del país, sacándolas del aislamiento, volando trayectos complejos y ofrendando su vida en la difícil ruta Loja - Zumba  en septiembre de 1982. Con heroica actitud y con ejemplar entrega llevó maquinaria y material para que se logre la construcción del Hospital de Zumba y la carretera desde Zumba a Vallodolid ya que era la única forma de lograrlo al no existir vías terrestres de penetración.

 Su entrega fue diaria, sacrificada, útil y beneficiosa.   A decir de Juan Cueva Serrano,  "uno de los mejores pilotos con los que contaba el Ecuador"[1]; y, de Ángel Felicísimo Rojas: “…Los Romero nacieron con alas… Los vuelos cotidianos de este audaz cóndor de los Andes eran el único contacto positivo entre el asilamiento total y la civilización citadina…  Pero la muerte del Chejo Romero Witt es portadora de un mensaje al Ecuador... Ha demostrado, al precio de su vida y la de sus fúnebres acompañantes, que es preciso, más que nunca, habilitar idóneamente las rutas que unen los rincones más remotos de la Patria con su centro, para que nos integremos hasta formar una unidad estrecha, comunicada entre sí por un sistema circulatorio que impida la anemia de unas partes y la congestión de otras.  De esta manera, el sacrificio de Romero Witt, no habrá sido en vano…”[2]

Su fecunda trayectoria inicia en el Aeroclub del Ecuador en 1962 cuando obtiene su licencia de piloto privado.  Más tarde cumplió como maestro e instructor de muchísimos pilotos civiles que sirven al país.  Fue Capitán de nave, Jefe de Operaciones de ECUAVÍA, TAO, CEDTA, LANSA, SAETA, SAN, AMERICANA DE AVIACIÓN, AECA, y ANDES, y por sus especiales dotes y conocimientos fue elegido Presidente de la Asociación de Aviadores Civiles Ecuatorianos.  Todo esto lo dejó, para cumplir su sueño y escribir la historia: Servir a la región de donde era oriundo.  Así, venciendo todo género de dificultades formó su compañía “AEROLÍNEAS CÓNDOR” para volar a poblaciones o ciudades en donde casi no existía apoyo aeronáutico, en donde ningún piloto se atrevía a volar por las complicaciones en las rutas y la escasa o nula infraestructura: la Región Sur del Ecuador.[3]


Vivió en Catamayo, para desde ahí continuar con su misión de servicio.  Todos sus aviones: C47; FAIRCHILD F-27; VICKERS VISCOUNT 880 (actualmente en el Complejo Vacacional Guayabal de Catamayo); DHC – 4 CARIBÚ, entre otros, eran bautizados como “Reina del Cisne”.  Hasta que encontró la muerte en la Cordillera de Sabanilla, en cumplimento de su deber y haciendo lo que amaba.

Este hombre, entre nosotros, “tuvo fe en la redención del sector más olvidado de la Patria, el sur oriente ecuatoriano, y lo vinculó al territorio nacional.  Creyó cuando nadie creía…. Hagamos justicia al aviador caído después de prestar un inconmensurable servicio a la Patria”[4]

[1] JUAN CUEVA SERRANO
[2] ÁNGEL F. ROJAS
[3] OSWALDO LEÓN M.
[4] MODESTO SEVERO  

martes, 11 de diciembre de 2012

Alfredo Mora Reyes

Nace el 16 de Agosto de 1904, en Sozoranga, parroquia rural del cantón Calvas en aquella época, realizó sus estudios en su tierra natal bajo la conducción y tutela de maestros particulares pagados por sus padres, se trasladó a la ciudad de Loja con la finalidad de realizar estudios de  bachillerato y nivel universitario, cristalizó sus propósitos en el Colegio Bernardo Valdivieso y en la Junta Universitaria de Loja. Graduado de Licenciado en Jurisprudencia se trasladó a Quito para poder obtener su título de Abogado de los Tribunales de la República y Doctor en Jurisprudencia que no podía otorgar la Junta Universitaria.
El involucramiento de Alfredo Mora Reyes en el quehacer educativo nacional fue significativo. Ejerció su magisterio y aportó a la educación, no sólo en el aula, sino en el ámbito administrativo. Fue profesor de los colegios "9 de Octubre" de Machala y Bernardo Valdivieso de Loja. Su cátedra Lógica y Ética.
En el nivel universitario fue docente por 41 años de la Facultad de Jurisprudencia de la Universidad Nacional de Loja y de la Pontificia Universidad Católica de Quito.
Fue Director de la escuela Miguel Riofrío, único centro de enseñanza laica con el que contaba la niñez masculina de la ciudad y Rector de la Universidad Nacional de Loja. En el desempeño del rectorado del Alma Mater lojana su gestión fue histórica. Implementó la planta docente con maestros rusos, alemanes y españoles contratados para las facultades de Agronomía y Veterinaria. Fortaleciendo el prestigio académico a nivel latinoamericano. Creo el Colegio Adolfo de Valarezo "anexo" a la Universidad, además los planos de la actual ciudadela universitaria en La Argelia también son su obra.
La función pública en Loja tuvo en el doctor Alfredo Mora Reyes un gestor de valía. Se desempeñó como: Gobernador de la Provincia, por dos ocasiones Consejero y Vicepresidente del Consejo provincial de Loja. Concejal y Vicepresidente del Consejo Cantonal, también en varios periodos. Y, Alcalde del Cantón Loja por elección popular en dos administraciones: 1955 - 1957 y 1959 - 1962.
Como Alcalde su obra fue fructífera. Se desarrolló, con prioridad, en los ámbitos de la educación, la salubridad y el ornato urbano de la cabecera cantonal. Levantó la Torre de San Sebastián, para estimula el deporte construyó la piscina de El Valle, gestión suya importante fue la implementación del servicio telefónico domiciliario en la ciudad.
Atendió obras de infraestructura, las necesidades de desarrollo en la población de las parroquias rurales. Construyó el Mercado de Catamayo. En lo vial integró a Chuquiribamba con la ciudad de Loja e implementó caminos vecinales en otras. Construyó lavanderías en las cabeceras parroquiales. Parroquializó los barrios Jimbilla y Guayquichuma.
En su faceta de abogado la colectividad lojana y nacional recibieron aporte de inestimable valor, en la administración de justicia desempeñó diversas funciones. Juez Tercero Provincial de Loja, Ministro Juez, Presidente por dos ocasiones de la Corte Superior de Justicia. Ministro Juez y Conjuez de la Corte Suprema de Justicia y Conjuez del Tribunal Fiscal.
Como hacedor de cultura, la vida de este ilustre lojano fue fecundo en realizaciones y logros. Colaboró con los diarios: El Sol, de Quito, La Opinión del Sur y El Mundo, de Loja. Prestigiadas publicaciones lo tuvieron como miembro de sus respectivos consejos editoriales. Entre ellas: Bloque, Hontanar, Claridad, Alba Nueva, América, Universitaria, Mediodía y el Boletín Jurídico de la Comisión Legislativa Permanente.
Como integrante de la generación de los 30, junto a su hermano José Miguel y a distinguido hombres de Letras y del Derecho, como fuero: Manuel Agustín Aguirre, Pablo Palacio, Pedro Víctor Falconí, y Ángel Felicísimo Rojas, entre ellos conformaron la vanguardia socialista, no sólo de Loja sino del Ecuador.
El Doctor Alfredo Mora Reyes fallece el 14 de mayo de 1990.

Tomado de: Lojanos Ilustres del Ayer. Tomo 1

lunes, 10 de diciembre de 2012

El Primer Alcalde de Loja

EDUARDO MORA MORENO

Nació en Loja el 26 de Noviembre de 1906. Hijo legítimo del Dr. Emiliano Mora Bermeo, cuya biografía puede verse en este Diccionario y de Luz Maria Moreno Valdivieso, naturales de Loja.
Hijo único pues su madre murió a consecuencia del parto y su padre cuando tenía solamente once años de edad, su abuela Alegría Bermeo de Mora lo llevó a su casa donde vivió hasta el fallecimiento de ella en 1925. Por eso decía: "He sido un huérfano integral".
Estudió la primaria en la escuela José Antonio Eguiguren y comenzó la secundaria en el San Gabriel de los padres Jesuitas de Quito; pero, como el rigor del internado se volvió intolerable, volvió a Loja escapado y terminó en el Bernando Valdivieso, donde fue redactor de la revista del Colegio y en otras de corta duración publicó sus primeros versos y los cuentos titulados "La Minga", "El Rastrojo" y "Mal Hechizo".
Su poesía inicial era sencilla, con imaginación, sentimiento, levedad y delicadeza que trasparentaba su alma en bellas expresiones cargadas de una emoción lejana, que se perdía en el horizonte de sus primeras vivencias.
En febrero de 1924 fundó la revista "Loxa" y allí publicó un cuento vernáculo, expresión gráfica de las costumbres campesinas de Loja. Cronológicamente fue el primero en dar el giro en el tratamiento del indio en la plenitud profunda de su dura realidad; sin embargo es menester indicar que en Guayaquil, por esa época también hacía cuentos realistas Leopoldo Benítez Vinueza, autor de "La Mala Sombra".
Ese año se graduó de Bachiller, comenzó sus estudios de Jurisprudencia en la Universidad de Loja y con motivo del viaje a Quito de su primo hermano Manuel Benjamín Carrión Mora, le compró la mitad que le correspondía en una hacienda de la sucesión de la abuela Bermeo y empezó a trabajarla con singular ahínco, alternando las labores agrícolas con la literatura.
El 2 de Junio de 1928 contrajo matrimonio con Luz María Vélez Valdivieso, matrimonio feliz con tres hijos, pero ella falleció prematuramente.
En 1930 fue designado Concejal del Cantón Loja. El 31 hizo la entrega de la letra para el himno del Colegio Bernardo Valdivieso a su rector Adolfo Valarezo y con su compañero de estudios Ángel Felicísimo Rojas fundó y dirigió la "Revista Universitaria".
En Noviembre recibió el nombramiento de Director de Estudios de la Provincia con S/. 250 mensuales de sueldo, estableciendo el desayuno escolar en las escuelas fiscales urbanas y hasta cedió su casa en la hacienda "Masaca" para que funcionara provisional mente una escuela rural. En la dirección duró cuatro años hasta el 35.
En 1932 salió electo cuarto Diputado Principal por Loja auspiciado por el grupo de los "Obreros Independientes", entidad de tinte socialista, ideario que por entonces compartía Mora Moreno y durante sus gestiones en Quito le tocó votar por la descalificación de Neptalí Bonifáz para la presidencia de la República.
En 1935 fue designado Profesor de Castellano y Literatura en el Bernardo Valdivieso. El 36 volvió a ser electo Diputado y tomando la vía de Guayaquil y el tren, pudo arribar a la capital. Así era el aislamiento de Loja, por falta de vías carrozables. En 1938 fue Vocal de la Junta de Asistencia Pública.
En 1939 dio a la imprenta un libro parvo de dimensiones, que contiene solamente cinco cuentos, bajo el título de uno de ellos: "Humo en las Eras" en 74 pags. con prólogo de Carlos Manuel Espinosa y portada de Galo Galecio, cuya segunda edición ampliada a siete cuentos apareció en la CCE de Quito en 1973. Benjamín Camón opinó que el indio lojano, materia plástica de los relatos de su primo Mora, es fuerte físicamente, sano, de una belleza ruda e impresionante; inteligente, perspicaz, fácil para la asimilación de las formas de vida superiores que se acerquen a él, no como el indio imbecilizado por la dominación de siglos. Por eso, sabedor Mora de las grandes virtualidades que hay en ese indio lojano, lo utiliza como personaje de creación artística y para señalar realidades, pasiones, desorientaciones; Señaló que también tenía una singular capacidad de ver amorosamente el paisaje y decir lo visto con claro estilo, con transida ternura, con emocionada poesía.
En Octubre de 1940, después de varios años de viudez, contrajo matrimonio con la Profesora Normalista Amelia Anda Aguirre, tuvo cuatro hijos más, una unión estable y feliz.
En 1941 salió electo por unanimidad Presidente de la Municipalidad de Loja y en el desempeño de tan altas funciones proyectó el Plan de Urbanización de dicha ciudad; los trabajos de urbanización del río Malacatos, comenzando en el puente de la calle Diez de Agosto y avanzando hasta el puente provisional ubicado en la extremidad occidental de la calle Mercadillo para facilitar la construcción de la vía marginal del
Durante la invasión peruana en Julio del 41 y con la Junta Patriótica Provincial logró el establecimiento de la V Zona Militar con sede en Loja y desempeñó las funciones de Intendente de Provisiones para brindar atención a los numerosos refugiados que habían llegado de la frontera. En su residencia se veía la caravana de gente que solicitaba ayuda y esa ayuda jamás les era negada, labor que no le impidió inaugurar el 26 de Agosto la I Asamblea de Municipios de El Oro y Loja.
Entre 1942 y el 43 desempeñó las cátedras de Derecho Territorial y Filosofía Jurídica en la Facultad de Jurisprudencia de la Universidad de Loja. El 43 fue Agente-Cajero ad-honorem del Servicio Cooperativo Internacional de Salud Pública que dirigía Wyman R. Stone y que realizó en gran parte la canalización de Loja. El 44 fue Conjuez Fiscal de la Corte Superior y prestó sus servicios en los Departamentos Jurídicos del Instituto Cooperativo de Salud Pública y del Ministerio de Previsión Social, donde trabajó hasta el 46.
En 1947, con motivo de la elección por primera ocasión de los Alcaldes del país fue candidatizado para la Alcaldía de Loja y salió electo por un período de dos años con 2.633 votos. Se posesionó en solemne ceremonia realizada en el teatro Bolívar, ofreció esa noche una recepción en su casa y a los pocos días agasajó al pueblo con un almuerzo campestre en su hacienda La Florencia.
Su obra, dentro de las limitaciones impuestas por un paupérrimo presupuesto, se circunscribió al adoquinamiento de las calles periféricas, pues ya empezaban a circular vehículos aunque aún seguían las mulas y los caballos siendo el principal medio de transporte urbano; aumentó las recaudaciones, contrató la provisión de tuberías para la ampliación del servicio de agua potable, mejoró la Central Hidroeléctrica de la finca Chile, construyó un puente sobre el río Zamora-Huayco, reparó los puentes Santa Rosa y Bolívar, amplió la Avenida a las márgenes del río Malacatos, arregló el Cementerio y la Casa Municipal, haciendo construir una oficina para la Alcaldía.
En 1949 asistió a la I Conferencia de Alcaldes del país celebrada en Quito y le correspondió atender al presidente Galo Plaza durante su visita a la ciudad de Loja.
Con Plaza hizo una gran amistad en razón de sus gustos comunes por la cría de ganado Holstein, al punto que le mandó a proponer a principios del 50 la dirección del Instituto Nacional de Fomento, que Mora aceptó gustoso, dada su condición de ganadero y agricultor. En Julio y a través del Ministro de Gobierno Carlos Zambrano Orejuela, socialista como Mora, le ofreció la Gobernación y como tal asistió a los festejos del IV Centenario de la fundación de la ciudad. Ese año figuró en la obra "El Nuevo Relato Ecuatoriano" de Benjamín Carrión.
En 1953 fue postulado por la Agrupación Democrática Independiente para la Alcaldía de Loja. El 55 formó parte del Frente Democrático Nacional y apoyó la candidatura presidencial del Dr. Raúl Clemente Huerta. El frente lo lanzó para Senador por Loja con el Dr. Isidro Ayora, aunque después prefirió encabezar la lista de Diputados. Realizadas las elecciones, triunfaron los conservadores con Camilo Ponce Enríquez, por escaso margen de votos. Mora fue electo Diputado, concurrió al Congreso y votó en contra del Acuerdo que proclamó Presidente a Ponce.
Durante su Diputación presidió la Comisión Fiscalizadora del Plan Vial de Construcción de dieciséis carreteras en el país, para lo cual tuvo que recorrerlas y constatar personalmente el avance de ellas. Obtuvo la irrigación de Macará y en Diciembre del 57 visitó la isla de Puerto Rico, invitado por ese gobierno. El 58 fue designado Vocal por el Congreso ante el Instituto Nacional de Previsión; sin embargo, a la par que realizaba esas funciones, no descuidaba sus labores agrícolas y ganaderas.
Lilo Linke, el popular escritor y periodista del diario "El Comercio" de Quito, visitó su hacienda "La Florencia, ubicada en el valle, a solo 8 kilómetros al norte de Loja y dijo: "Se entra por la Carretera Panamericana, la casa ha sido ampliada y transformada en una villa elegante, la más elegante que vi durante mi estadía en la provincia. Sale el dueño: hombre alto, delgado, buen mozo, con los finos modales de un diplomático y la cultura propia del escritor que es miembro de una familia de distinguidos intelectuales. Parece una pose cuando se llama a si mismo ganadero, pero basta una breve conversación para darse cuenta que para él, la ganadería es una cosa seria. Hay ochenta vacas, todas de alto cruce Holstein, de las cuales cincuenta están produciendo. La Florencia da doscientos cincuenta litros diarios de lecha para la venta, más lo que se reserva para la alimentación de los becerros y el consumo familiar y de los empleados. El Dr. Mora ha plantado muchos árboles frutales; ciruelos, duraznos, manzanas, aguacates. El clima es ideal, también plantó unos pocos olivos. El jardín está cuidado por su esposa..."
En 1960 salió electo Senador suplente por la Agricultura de la sierra. El 62, como sus hijos necesitan estudiar en la Universidad Central, decidió ausentarse a Quito; pero antes convocó a sus colonos que trabajaban en calidad de peones o arrimados y les entregó por escritura pública los terrenos que venían ocupando en la Loma.
Entonces, habiendo cumplido modestamente con ellos, se ausentó del lugar. En Quito fue electo Vocal del Tribunal Supremo Electoral y el 63 Profesor de Historia de la Cultura en el Instituto de Derecho internacional. El 64 fue miembro del Instituto Ecuatoriano de la Reforma Agraria y Colonización (I.E.R.A.C.). El 65 la Junta Militar de Gobierno le designó Presidente de la Comisión encargada de estudiar y sugerir la adecuada solución de los problemas de la Provincia de Loja y ocupó una de las vocalías de la Comisión Nacional de Valores.
En 1966 y a la caída de la dictadura de la Junta Militar de Gobierno, fue electo miembro de la Casa de la Cultura Ecuatoriana por la sección de Literatura. El 68 fue Vocal del tribunal de Garantías Constitucionales. El 72, durante la dictadura del General Guillermo Duran Arcentales, fue designado Ministro de Educación el General Vicente Anda Aguirre, cuñado de Mora, que le solicitó presidir la Comisión para redactar la Ley Nacional de la Cultura y cuando en Mayo del 73 se procedió a reorganizar la Casa de la Cultura Ecuatoriana, fue nombrado Director Nacional de dicha institución cultural; mas, al poco tiempo, por la trágica muerte del Ministro, ocupó dicho portafolio el General Guillermo Duran Arcetales, quien inició una política de hostilidad pues quería reemplazarle con su amigo personal, el Secretario de la Junta de Defensa Nacional Galo Rene Pérez, persona de toda su confianza, al punto que Mora tuvo que renunciar con grave escándalo del país.
En Mayo del 77, el General Bolívar Jarrín Cahueñas, Ministro de Gobierno de la Dictadura del Consejo Supremo de Gobierno, ante la renuncia del Alcalde de Loja Ing. Gonzalo Jaramillo Puertas y la imposibilidad de que alguien de renombre le acepte dichas funciones dada la proximidad del retorno constitucional, delegó en los Concejales de Loja la designación del nuevo Alcalde. Situación suigéneris que provocó una favorable reacción ciudadana y el Concejo por unanimidad de votos nombró a Mora, quien aceptó tan honrosa como inesperada postulación, ejerciendo por segunda vez dichas funciones hasta Septiembre del 79 que volvió la democracia al país. Su paso por la Alcaldía impidió la acefalía del Concejo. Para entonces era la personalidad más respetada de su provincia.
En 1982 el Núcleo de Loja de la CCE desvelizó su retrato y el de Eduardo Kigman Riofrio. En 1986 celebró ochenta años de edad con una fiesta en su hacienda. Ese fue su último acto público, pues se encontraba sufriendo algunas molestias por un cáncer que luego se le descubrió en la próstata y que le ocasionó la muerte en Quito, el 11 de Septiembre de 1987.
Su cadáver fue llevado a Loja donde recibió honras en el salón de la ciudad y en la Catedral, y fue exhumado en el Parque de los Recuerdos.
En sus últimos tiempos se había dedicado a borronear algunas anécdotas que dejó incompletas y fueron publicadas así en 1989 bajo el título de "La Nieblas del Recuerdo" en 38 pags. junto a un ensayo de 4 páginas titulado "Leyendo Maria". En 1990 su viuda dio a la luz "Eduardo Mora Moreno, su obra y su recuerdo" en 571 pags. con su Curriculum, opiniones sobre su vida pública y datos sueltos de prensa.
Su figura alta, morena, elegante, irradiaba simpatía y cordialidad y le hacía grato a los ojos. Su traje oscuro, sombrero de fieltro, gesto agradable. Sus ocupaciones y la vida de provincia le impidieron llegar a ser el gran escritor para lo que estaba tan bien dotado. 

Tomado de: http://www.diccionariobiograficoecuador.com/tomos/tomo14/m8.htm
 

sábado, 8 de diciembre de 2012

José Castillo Luzuriaga

José Castillo Luzuriaga nació en Sozoranga, el 12 de diciembre de 1922. Sus estudios primarios los cursó en la Escuela Zoilo Rodríguez y Santa Juana de Arco, siendo el mejor alumno; los secundarios en el Normal Eloy Alfaro, de Cariamanga, en donde se gradúa de profesor primario. Fue el mejor egresado.
También estudió en la Universidad Nacional de Guayaquil. Se graduó de abogado en Cuenca. Realiza estudios en el extranjero.
Ha ocupado diversos cargos: teniente Político, secretario de Hogares de Protección Infantil, consejero provincial, vicepresidente de la Junta Patriótica, diputado por varias ocasiones, entre otros; dinamizador de la expansión urbana de la ciudad de Loja, lideró la Legislación que dio paso a que las propiedades de la Fundación Álvarez puedan ser destinadas a lotizaciones con propósitos viviendísticos. En el campo político se lo conoce con el mote de "Sí, juro".

jueves, 6 de diciembre de 2012

El modernizador del estado ecuatoriano

(Loja, 1879 - Los Ángeles, 1978) Médico y político ecuatoriano, presidente interino de la república entre 1926 y 1929 y presidente constitucional de 1929 a 1931. Realizados sus primeros estudios en su ciudad natal, hizo la carrera de medicina en la Universidad Central de Quito, en donde se graduó en Medicina y Cirugía con la tesis "Leyes biológicas y sus aplicaciones". Completó su formación en Alemania, donde se especializó en obstetricia y Ginecología, en la Universidad de Berlín.
Tras regresar a Ecuador, se dedicó al ejercicio de su profesión y a la docencia: dirigió la Maternidad, la Escuela de Enfermeras por él fundada, el Hospital de San Juan de Dios, el Hospital Civil y la clínica "Isidro Ayora". Fundó, junto con los doctores Ángel Sáenz y Ricardo Villavicencio, la clínica Quirúrgica; estableció la primera Casa-Cuna de Quito; y fue segundo presidente de la Cruz Roja Ecuatoriana.
En el campo de la docencia, se desempeñó como profesor de obstetricia de la Universidad Central, como Decano de la Facultad de Medicina y, desde 1925, como Rector de la Universidad Central. En todos sus cargos se manifestó honesto, serio, creativo y firme. A partir de 1919, incursionó en la política como concejal y presidente del Municipio de Quito. Tras la revolución "juliana", que acabó con la hegemonía del partido Liberal Radical el 9 de julio de 1925, se sucedieron varias Juntas de Gobierno; en la segunda de ellas, Isidro Ayora fue encargado de la Cartera de Previsión Social (enero 1926), recientemente fundada.
El primero de abril del mismo año, se formó otra Junta Suprema de Gobierno, que designó a Isidro Ayora como presidente provisional de la República; en calidad de tal, gobernó hasta 1928, año en que la Asamblea Constituyente que él mismo convocó le designó presidente interino, para confirmarlo el 17 de abril de 1929 como presidente constitucional, cuyo mandato debería prolongarse hasta 1932. 

Transformó la estructura económica de Ecuador a principios de siglo, on la ayuda de la Misión Kemmerer, promulgó la ley que establecía un nuevo valor para el sucre y la que fundaba el Banco Central de Ecuador. Creó también la Superintendencia de Bancos, el Banco Hipotecario, y la Caja de Pensiones. Dictó por primera vez varias leyes de trabajo como el contrato individual, la protección de la maternidad y desahucio.. 

En diciembre de 1928 se instaló una Asamblea Constituyente que expidió la XIII Constitución de la República y eligió presidente a Ayora. En materia de garantías constitucionales esta fue una de las más avanzadas: consagró el Habeas Corpus, el voto de la mujer, la igualdad de los hijos ilegítimos y la representación de las minorías políticas. Renunció el 24 de agosto de 1931.

miércoles, 5 de diciembre de 2012

Manuel Agustín Aguirre

Manuel Agustín Aguirre Ríos, (12 de julio de 1903, Loja - 12 de septiembre de 1992, Quito) fue un dirigente político y catedrático ecuatoriano. En varias ocasiones Secretario General del Partido Socialista del Ecuador, fundador y primer Secretario General del Partido Socialista Revolucionario Ecuatoriano, primer Decano de la Facultad de Economía de la Universidad Central del Ecuador.

Hijo de Agustín Aguirre Aguirre y Antonia Ríos. Estudio la primaria en la Escuela de los Hermanos Cristianos, y la secundaria en el colegio "Bernardo Valdivieso". En 1921 ingreso a la carrera de jurisprudencia en la Universidad de Loja, finalmente se graduaría en leyes en 1930 en la Universidad Central de Quito. En 1925 forma parte de la célula socialista La Vanguardia que adhirió al Primer Congreso Socialista en 1926. En 1931 contrajo matrimonio con Teresa Borrero Riofrío, también en este año se publicó su primer libro de poesía titulado Poemas Automáticos, al que seguirían en 1935 Llamada de los Proletarios y Pies Desnudos. Desde mediados de la década de 1930 se instala con su familia en Quito, donde se dedica al libre ejercicio profesional de la abogacía e inicia su labor docente como profesor de Literatura Universal en el Instituto Nacional Mejía. A lo largo de su vida fue catedrático en varias escuelas y facultades de la Universidad Central como Jurisprudencia, Filosofía y Letras. Y en 1942 fue primer Decano de la Facultad de Ciencias Económicas de la misma universidad cargó que ocupó hasta 1950.
En 1940 fue elegido Secretario General del Partido Socialista Ecuatoriano, siendo una figura destacada en la lucha contra el régimen de Carlos Alberto Arroyo del Río, teniendo que pasar hasta la Revolución del 28 de mayo de 1944 en la clandestinidad. Integro el Buró Político de la Alianza Democrática Ecuatoriana (ADE) en representación del socialismo, y como tal tuvo activa participación en la agitación política y organización de la Revolución del 28 de mayo. Tras el triunfo del movimiento revolucionario, formó parte de la Asamblea Constituyente en calidad de Representante Funcional de los Trabajadores fue elegido Primer Vicepresidente de la Asamblea. Fue expulsado del país tras el golpe de estado del 30 de marzo de 1946, permaneciendo en el exilio hasta su regreso el 31 de agosto para encabezar el XII Congreso del Partido Socialista (15 de noviembre del mismo año). En este Congreso, expondría su valoración sobre el triunfo y derrota de la revolución de 1944.
" El golpe de estado del 30 de marzo constituye pues, la culminación de un largo proceso de lucha entre las fuerzas democráticas y revolucionarias y las fuerzas reaccionarias y contrarrevolucionarias..."
Aguirre se opondría a la política de participación en el gobierno de Galo Plaza de 1951 impulsada por el Secretario General socialista de entonces Luis Maldonado Estrada. Este sería el inicio de una larga disputa ideológica que llevaría a la división del Partido Socialista. En 1963 Manuel Agustín Aguirre, junto a Telmo Hildalgo encabezan la formación del Partido Socialista Revolucionario del Ecuador (PSRE). En 1969 con el apoyo de las fuerzas de izquierda es elegido Rector de la Universidad Central, desde donde impulsa el proceso de Segunda Reforma Universitaria, una de cuyas primeras medidas fue abolir los cupos y los exámenes de ingreso, instaurando el libre ingreso. La dictadura de Velasco Ibarra en 1970 le despojó del Rectorado, se negó a ir al exilio estando encarcelado por tres meses. En 1979 se opuso al Plan de Retorno y a la promulgación de la ley de partido que consideraba antidemocrática.
 

martes, 4 de diciembre de 2012

Clodoveo Carrión Mora (1883–1957)

Clodoveo Carrión nació en Loja

Sus padres fueron Manuel Alejandro Carrión Riofrío, poeta, y Filomena Mora Bermeo. Fue hermano de Hector Manuel (poeta), José Miguel (abogado, sociólogo, senador y rector de la Universidad Nacional de Loja) y Benjamín Carrión.
Fue alumno de la escuela de La Salle y del Colegio Bernardo Valdivieso. De joven se reconoció más inclinado a las ciencias naturales que a las letras, al revés que el resto de su familia. Para continuar su formación científica viajó a Europa. Estudió en las universidades de Londres y Mánchester donde obtuvo el título de ingeniero industrial. Durante su estancia de diez años en Europa realizó muchos estudios en España y Francia.

Regreso de Europa

Tras regresar de Europa fue profesor de ciencias naturales en el Colegio Bernardo Valdivieso hasta su jubilación. En 1924 presentó sus descubrimientos en el Panamerican Scientific Congress de Lima. Mantuvo correspondencia con científicos distinguidos como Edward W. Berry de la Universidad Johns Hopkins; el geólogo Errof I. White del British Museum; Orestes Cendrero del Instituto General y Técnico de Santander, España, y Waldo L. Schmitt del American Museum of Natural History.

Fue declarado Doctor Honoris causa por la Universidad Nacional de Loja.

Contribuciones científicas

Carrión trabajó en paleontología y entomología, campos en los que descubrió muchas especies y géneros. Algunos de sus descubrimientos fueron:
  • Plantas: Elaphoglossum carrioni, Melochia carrioni, Caussapea carrioni.
  • Otras paleoespecies que clasificó en los siguientes grupos: Spotfungi , Bryophyta, Pteridophyta, Monocotyledonae, Dicotyledonae, Urticales, Santalales, Chenopodiales, Ranales, Rosales, Geraniales, Sapindales, Rivimnales, Malvales, Laurales, Myrtales, Ebenales, Gentianales, Rubiales.
Estos descubrimientos fueron descritos extensamente por White (1927) y Berry (1929) y resultaron fundamentales para entender la última fase de la evolución geológica de los Andes.
En zoología sus principales descubrimientos fueron:
  • Peces: Carrionellus diomortus y Lipopterichthys carrioni
  • Reptiles: Atractus carrioni, Botrops lojana, Stenocercus carrioni Parker, 1934
  • Arthropods: Triatoma carrioni (chinche de caballo), vector del la enfermedad de Chagas en el sur de Ecuador. Su descubrimiento fue documentado por F. Larrousse (1926).
  • Ranas: Eleuterodactilus carrioni, Hila carrioni, Gastrotheca marsupiata lojana. Sus descubrimientos fueron catalogados por Parker (1930, 1932, 1934, 1938).
  • Coleópteros: muchas especies pertenecientes a las familias Cerambycidae, Scarabaeidae, Meloidae, Elateridae, y Tenebrionidae.
Tomado de: http://es.wikipedia.org/wiki/Clodoveo_Carri%C3%B3n_Mora

lunes, 3 de diciembre de 2012

Gracias por su apoyo

Este blog ha recibido mas de 1000 visitas en menos de una semana, gracias por su apoyo y creer en esta iniciativa.

Además, gracias a sus sugerencias, desde hoy se incluyen el nombre 5 ilustres lojanos.

Sigan votando, y desde mañana seguimos con las microbiografías de todos estos hermanos lojanos, que han hecho quedar por lo alto el nombre de nuestro terruño.

"Por que creo que la lojanidad se construye también a través de símbolos"

viernes, 30 de noviembre de 2012

El pintor de las manos



Hijo segundo del Dr. Edward Kingman y de doña Rosa Riofrío, fue matriculado en la escuela anexa al normal Juan Montalvo donde realizó la primaria, pero como dibujaba desde niño, al terminar el primer curso de secundaria en el Mejía decidió cambiarse a la Escuela de Bellas Artes.

En 1933 expuso con Antonio Bellolio en la última muestra de Allere Flamma, al año siguiente hizo varios cuadros que vendió en el salón municipal “Mariano Aguilera” de Quito.
En junio del 46 expuso en el Museo de San Francisco. La revista Time, le coloca entre los grandes pintores de Hispanoamérica, luego fue a Nueva York y expuso en la Unión Panamericana de Washington. En el 49 expuso en el Museo de Arte Colonial, veintiséis oleos con motivos populares y colores frescos, briosos, alegres. En el 55 expuso en Guayaquil. El 56 en Bogotá y en Caracas. Para el 74 había expuesto en la Maxwell Galleries de San Francisco.

Reconocimientos
En 1953 obtuvo el I premio del quinto salón de Artes Plásticas. El 59 ganó el Primer premio en el “Mariano Aguilera” con “Yo el prójimo”, visión aterradora de un mundo en crisis. El 73 le fue concedida la medalla al mérito Artístico de la Municipalidad de Guayaquil y el 75 la condecoración Nacional al Mérito con el grado de Comendador.

Tendencia artística
Su carrera comenzó como pintor expresionista por sus ideas político-sociales. El tema del dolor y maltrato indígena, ocupará en gran parte la tendencia de este artista. Se hizo célebre por las grandes y poderosas manos de sus personajes, símbolo desasosegado de fuerza. El tema de las manos, se repite en casi todos sus cuadros, esto le ha ganado la reputación de ser “el pintor de las manos”. 

Tomado de: http://es.wikipedia.org/wiki/Eduardo_Kingman

jueves, 29 de noviembre de 2012

Loja Federal, el primer grito desentralizador

Fue el pilar fundamental para que Loja se constituya como Estado Federal de la República del Ecuador, el 18 de septiembre de 1859, dando el primer paso de nuestra vida independiente.

Manuel Carrión Pinzano nace el 6 de agosto de 1809 en Sanlúcar de Barrameda, fue hijo del lojano Manuel Carrión Valdivieso y de la española Antonia Pinzano y Naguer. Su trayectoria profesional es muy amplia, fue Gobernador Civil, Senador y Diputado, Jefe Civil y Militar de la provincia de Loja además, de ser el fundador de la Corte Superior de Justicia, de la Universidad Nacional de Loja al establecer la Facultad de Jurisprudencia, Teología y Medicina, mediante decreto expendido el 31 de diciembre de 1859; cantonizó Santa Rosa, reglamentó el servicio de las aduanas, propició la creación del Obispado de Loja Manuel Carrión Pinzano, ha sido la figura cimera de un acontecimiento de singular trascendencia en la historia seccional de Loja y de gran resonancia en el ámbito de la nación, pues se constituyó en el pilar fundamental de Loja como ESTADO FEDERAL de la República del Ecuador, el 18 de septiembre de 1859.

Carrión Pinzano, persuadido por el deseo constante de servir a su patria, supo poner todo el vigor de su talento y el caudal de sus virtudes cívicas al servicio de la supervivencia de la patria chica y del Ecuador entero, ha sido reconocido como el símbolo del patriotismo y del sacrificio heroico. Muere el 2 de febrero de 1870.

"LOJANOS: vuelvo a la vida privada con la gloria de haber servido de centro a un pueblo ilustrado y pacífico, que sabe elegir el principio que le conviene y tiene valor y constancia para sostenerlo"

Tomado de: http://www.vivaloja.com/content/view/383/

miércoles, 28 de noviembre de 2012

Pablo Palacio (Loja, 25 de enero de 1906 - Guayaquil 7 de enero de 1947)



Escritor y abogado lojano. Fue uno de los fundadores de la vanguardia en el Ecuador y América Latina, por tanto un adelantado en lo que respecta a estructuras y contenidos narrativos por ser su obra casi no correspondida a los escritores del costumbrismo de su época.
Su infancia transcurre al cuidado de su madre hasta los seis años y de un tío, en su ciudad natal. De este lapso debe señalarse un accidente sufrido a orillas de un río donde sufre una cicatriz de por vida. A los quince años ganó su primer premio por su autobiografía llamada El huerfanito. Durante su época de bachillerato leía libros de romanticismo y modernismo. Luego de graduarse de bachiller se traslada a Quito, en donde ingresa a la Universidad Central de Ecuador, con un excelente promedio, lo que alentó a su tío a pagarle los estudios de Jurisprudencia para más tarde titularse de abogado.
 Durante su estadía en la ciudad capital, se convierte en poco tiempo en uno de los referentes del Partido Socialista Ecuatoriano. Poco después de graduarse publica su libro Débora y Un Hombre. Fue Decano de la Facultad de Filosofía y Letras, profesor de Literatura y Filosofía cuando era Ministro de Educación Benjamín Carrión, ejerció la Subsecretaría del ramo; y fue Segundo Secretario de la Asamblea Constituyente convocada por el General Enríquez Gallo. Además fue subsecretario del Ministerio de Educación.
"Solo los locos experimentan hasta las glándulas de lo absurdo y están en el plano más alto de las categorías intelectuales", escribiría en uno de sus relatos. Solo los locos se esfuerzan por recuperar la lucidez desde la audacia. Mientras la generación de escritores del 30 se dedicaban al realismo social, a él se le ocurrió ser un adelantado a su época, indagar en la psicología del hombre, hablar de seres y casos mórbidos, de antropófagos sádicos o de siamesas celosas, de huerfanitos con miedo, de mujeres que miran las estrellas, de comedias cotidianas, pero inmortales. Por eso, su breve producción literaria, de apenas una década (1921-1932), sufrió hasta los años sesenta de hostilidad e incomprensión por temor, quizá, de que su "Treponema pálido" contagiara de atrevimiento a la literatura. En 1932 escribió la novela subjetiva Vida del ahorcado.
Su producción literaria se condensa en cuatro libros: "Un hombre muerto a puntapiés" (libro de cuentos editado por primera vez en enero de 1927), "Débora" (novela publicada en noviembre de ese mismo año), "Comedia inmortal" y "Vida del ahorcado" (1932). Sin embargo, hay que anotar que una primera novela de Palacio obtuvo el primer premio en un concurso en su provincia, "Ojeras de la Virgen", que ha permanecido inédita y cuyos originales parecen haberse perdido.
A partir de 1936 su inteligencia se ve menguada tempranamente por una exquisita locura que se trasluce en su obra. Se casó en 1937, después de un largo enamoramiento, con la destacada artista Carmita Palacios. En 1940 se internó en el manicomio Lorenzo Ponce de Guayaquil. La cuestión de su locura se transformó en una de las grandes coartadas de los críticos que lo acallaron y se burlaron de él; pero vale aclarar que Palacio escribió todos sus textos cuando estaba cuerdo, detalle que suele ser ignorado por quienes lo critican.
El crítico peruano José Miguel Oviedo afirma: "En la literatura ecuatoriana de su época, dominada por la llamada "generación del 30" (Jorge IcazaDemetrio Aguilera Malta y otros), que implantó el canon social-realista, el tema indigenista y el fervoroso alegato ideológico como las características —algo monótonas— de la narrativa nacional, la brevísima obra de Pablo Palacio es una incómoda y discordante excepción. Esa cualidad singular e inasimilable de su producción condujo a una serie de malentendidos y confusiones que contribuyeron a oscurecer su aporte, que sólo en las dos últimas décadas ha empezado a revaluarse seriamente: todavía estamos descubriendo a Palacio, mientras, paradójicamente, muchos de los "realistas" de su tiempo pasan al olvido."
Afectado por esta irreversible enfermedad, murió en el manicomio a la edad de 40 años.

Tomado de: http://es.wikipedia.org/wiki/Pablo_Palacio

martes, 27 de noviembre de 2012

Segundo Cueva Celi

Nació en Loja el 10 de enero de 1.901, Fue su padre el Doctor Juan Cueva García, ilustre abogado profesor del Colegio "Bernardo Valdivieso" de Loja, Cónsul del Ecuador en New Orleans, Ministro Plenipotenciario en Londres en 1.916 y luego en Panamá y Vicepresidente del ferrocarril ecuatoriano en New York. Fue su madre Zoila F. Celi Castro, prima hermana del notable compositor Salvador Bustamante Celi, todos lojanos.
Nació normal pero la inexperiencia del médico que le trajo al mundo, quien le puso en exceso nitrato de plata, le ocasionó un daño permanente en la vista, agravado a los cinco años cuando otro médico le recomendó unas ciertas gotitas dizque para mejorarlo, pero de la botica mandaron el remedio equivocado y al ponerle en el ojo izquierdo se lo quemaron para siempre, pues era un ácido. Desde entonces veía muy poco y únicamente con el derecho, era casi un ciego.
El niño se hizo tímido y meditabundo y rehuía el trato de sus compañeritos de escuela, refugiándose en la música pues poseía buen oído y exce1ente voz y aprendió sin maestros. Cuando ingresó al Colegio de los Hermanos Cristianos ya sabía tocar al piano con alguna destreza y fue la admiración de todos. El mismo diría después: "Era yo muy niño, iba a la escuela, a la espalda un morral y en mis manos un rondín y todas las mañanas al volver de clases, el Gerente de la Singer, un señor Lebly, me esperaba al paso y luego de oírme tocar, me regalaba una peseta. Mi nuevo profesor, el Hermano francés Antonino, solía decir: A Segundo debemos ponerlo en manos del franciscano Antonio Vega, gran violinista doctorado en Lima, quien hizo de mí un amante de la música. Desde los siete años empecé a escribir música religiosa para el Coro de San Francisco; más tarde, vino la música profana, particularmente la de la tierra, pues el padre Vega me enseñó composición, armonía, dictado musical". De nueve años se presentó por primera vez en público con gran éxito, ejecutando piezas sencillas en el armonio de esa iglesia pues sus piernas no alcanzaban los pedales.
En 1.916 formó parte del "Sexteto de Loja" con Francisco Rodas Bustamante, Segundo Puertas Moreno, David Pacheco, Serafín Alberto Larriva, Manuel Torres, Sebastián Valdivieso Peña y Antonio Eduardo Hidalgo. En 1.917 aprendió a tocar violín sólo con el método “Maya-Van” que le envió su padre desde los Estados Unidos.
Poco después comenzó a hacer voluntariado con las monjas de Loja y daba clases particulares de música para ayudarse pues era muy pobre y vivía con su madre de lo que buenamente ella producía en labores de mano.
En 1.920 su gran amigo Emiliano Ortega Espinosa le pidió que pusiera música a la poesía Vas Lacrimarum de José María Egas y así fue como nació el pasillo de ese nombre.
En 1.923 su padre le envió dinero para que se traslade a Colón en Panamá, donde fue huésped de Colón Eloy Alfaro. En el hospital de esa ciudad le operaron la vista pero no mejoró.
En 1.926 se enamoró de la joven Victoria Espinosa Ruiz, le dio numerosas serenatas y terminaron casados un año después. En 1.928 su padre les invitó a viajar a Quito donde estaba de Diputado a la Asamblea Nacional Constituyente y allí se mantuvo de su trabajo como concertista de violín en diversos teatros y Centros artísticos, pero, su esposa -que siempre tuvo el carácter malgenioso- pronto se cansó del clima capitalino y lo obligó a regresar a Loja, frustrando sus planes para el futuro. Entonces adquirió una casa cercana a la Plaza de San Sebastián, que hoy ostenta en su fachada una placa de mármol puesta en su honor.
Desde 1.935 fue profesor de Música del Bernardo Valdivieso y ganó una Medalla de Oro por su arte. Entre los años 40 y 50 recibió numerosas preseas de la Municipalidad de Loja y del Colegio La Dolorosa por su himno a la Virgen. También compuso valses, pasillos, nocturnos y hasta música seria de carácter sinfónico. Otra vena especial de su ingenio fue la música escolar a base de canciones simples, rondas infantiles y marchas patrióticas.
Su carácter amable, jovial, la suavidad de su trato con los demás, su pobreza franciscana, su personalidad serena, todo le granjeaba el cariño y la comprensión de los que tuvieron el privilegio de conocerle y tratarlo, así como de escuchar sus finas composiciones tales como "Ultimo Recuerdo", el pasillo “Pequeña Ciudadana” con letra de Alejandro Carrión, "Tardes del Zamora", "Laura" y "Dulce Tristeza". Entre sus mejores pasillos se cuenta "Vaso de Lágrimas", "No importa", "A Ella", "Madrigal de Seda" que inmortalizaron su nombre, así como "Plegaria Salvaje" que presentó en Cuenca la famosa bailarina Osmara de León, de danzas modernas, por eso conocida -como la de los pies desnudos.
En 1.943 fue Concejal en su ciudad natal. En 1.947 ingresó de miembro de la Casa de la Cultura y por largos años dirigió los programas radiales de la estación “Ondas del Zamora”.
En 1.958 fue llamado por el Presidente Camilo Ponce Eníiquez para entregarle la Orden Nacional al Mérito y se quedó a vivir en Quito. Ya estaba jubilado y consiguió varios contratos. La Radio Nacional del Ecuador y la de la Casa de la Cultura le propusieron ejecutar varios Conciertos semanales de piano que pronto se hicieron famosos y eran esperados en la mayor parte de las casas con notable interés. Su vecino Enrique Avellán Ferres le pidió que musicalice su “Clarita la negra” como canto infantil.
También instaló una pequeña Academia de Música en su domicilio, donde tenía relojes pendulares en casi todas las habitaciones que gustaba sincronizar diariamente pues era meticuloso y ordenado, así como jardinero y agricultor en sus ratos perdidos porque su casa de Loja tenía una pequeña huerta. Impartía clases por las tardes a numerosos jóvenes de ambos sexos. Pronto su casa se transformó en cenáculo de artistas y compositores de valía. Allí iban a visitar al maestro N. Carpio Abad autor de La Chola Cuencana, Enrique Espín Yépes de Pasional, Miguel Angel Casares de Lamparilla, el ex Director del Conservatorio de Quito Juan Pablo Muñoz Sánz, quien fue su más íntimo amigo; sin embargo, no sólo eran músicos sus asiduos visitantes, también concurrían Manuel Agustín Aguirre y su esposa Teresa Borrero, el yuro Andrés F. Córdova, quien siempre llegaba cargando un viejo acordeón y se encerraba en la sala a tocar música y a hablar de todo un poco.
Los diputados lojanos le llamaban por teléfono para pedirle que oyera a tal o cual hora sus discursos, también le visitaban para recopilar información en su Biblioteca, pues la tenía especializada en Loja y su provincia.
En 1.967 obtuvo el 1° y 2° premios en el concurso de villancicos en Quito y en junio del 68 el Municipios de Quito le tributó homenaje público. Ese año tuvo un problema de salud a causa de una molestia estomacal que no pudo ser diagnosticada en el Hospital del IESS y que al evolucionar se le transformó en un cáncer que lo despedazó físicamente en pocos meses de increíbles sufrimientos. Perdió tres arrobas de peso en un proceso muy doloroso aunque no perdió su buen humor ni su proverbial gentileza.
La noche anterior a su muerte, estando en su casa el Dr. César Ayora -médico de cabecera- acompañado de dos jóvenes galenos lejanos que en el Colegio Valdivieso habían sido sus discípulos en las clases de música, el enfermo pidió que les sirvieran algún refrigerio o una copita de vino y poco después entró en coma, falleciendo al día siguiente 17 de abril de 1.969, a las 12 y 10 de la larde, de 68 años de edad, siendo sepultado en la cripta de la Iglesia de San Francisco.
Su deceso produjo consternación en toda la República. Su provincia decretó tres días de duelo y al poco tiempo en 1.973 le levantó un busto en bronce para perennizar su memoria.
Dejó doce álbumes de música que esperan su publicación, más de ochenta composiciones grabadas dentro y fuera de la República y casi tres mil temas diferentes que algún día deberán ser difundidos. Fue un musicólogo excepcional (Compositor y ejecutante notabilísimo) que también escribió ensayos sobre aspectos esenciales de la música, mucho de los cuales salieron publicados en la revista "Mediodía", órgano del Núcleo Provincial de Loja.
Fue austero y de escasa vida social, a pesar que en confianza era sumamente comunicativo. La radio “La voz de los Andes” conserva en sus archivos versiones magnetofónicas de sus numerosas intervenciones, que demuestran la depurada técnica que había adquirido en la ejecución del violín y piano, también fue muy diestro en la guitarra, el acordeón y el bandolín y en éste último instrumento logró hermosas interpretaciones religiosas.
Siempre caminó erguido y elegante, usando lentes oscuros por su deficiencia visual.

Tomado de: http://www.diccionariobiograficoecuador.com/tomos/tomo3/c10.htm

lunes, 26 de noviembre de 2012


HIDALGO DE PROCEL, Matilde

Nació en Loja el 29 de septiembre de 1889, hija del señor Juan Manuel Hidalgo y de la señora Carmen Navarro.
Luego de realizar sus primeros estudios, en el año 1907, cuando aún la mujer ecuatoriana no acudía a los colegios de enseñanza secundaria, se matriculó en el Colegio Bernardo Valdivieso de su ciudad natal, y con calificaciones sobresalientes cursó los seis años hasta graduarse de Bachiller en 1913.
Frustrada en sus aspiraciones de continuar sus estudios en la Facultad de Medicina de la Universidad Central, ya que su condición femenina era considerada como un impedimento para el estudio de tal ciencia, se trasladó a la ciudad de Cuenca donde apeló al juicio del Dr. Honorato Vásquez, rector de la Universidad del Azuay, quien comprendiendo sus derechos y aspiraciones le permitió su ingreso a dicho centro de enseñanza superior. El 29 de junio de 1919, después de obtener las más altas calificaciones a través de todos los años del programa, pudo al fin obtener el título de Licenciada en Medicina. Inmediatamente se trasladó a Quito donde gracias al título adquirido en Cuenca se le permitió ingresar a la Universidad Central, y en 1921, tras lucidos exámenes de grado, se convirtió en la primera médica del Ecuador.
Al contraer matrimonio con el prestigioso abogado zarumeño Dr. Fernando Procel Lafevre, se trasladó a vivir a la ciudad de Machala donde realizó una verdadera labor reivindicadora por los derechos de la mujer ecuatoriana.
En el año 1924, cuando se abrieron los registros de inscripción para empadronamientos con el propósito de convocar a elecciones para diputados y senadores, a las 9 a.m. del día 2 de mayo fue la única mujer que se acercó a las juntas para hacer uso del derecho que creía constitucionalmente suyo, como ciudadana comprendida dentro de los requisitos impuestos por la ley electoral. Los miembros de la mesa de inscripción, sorprendidos ante esta situación, expusieron criterios negativos y no aceptaron sus requerimientos; ante esta actitud abrió un ejemplar de la Constitución vigente y en voz alta leyó el contenido del artículo 13 que decía así: “Para ser ciudadano ecuatoriano se requiere tener 21 años de edad y saber leer y escribir”.
No fue fácil para las autoridades de la provincia de El Oro aceptar su solicitud, por lo que elevaron su consulta hasta el Consejo de Estado, que en histórica sesión del 9 de junio de 1924 resolvió por unanimidad de votos autorizarla a ella y a toda mujer ecuatoriana el pleno derecho de integrarse a la acción cívica del sufragio. De esta manera se convirtió también en la primera sufragista del Ecuador y de América Latina, y poco tiempo después fue elegida Concejal y fue la primera mujer vice-presidenta de una corporación municipal.
En reconocimiento a su constante lucha en pro de los derechos de la mujer ecuatoriana, el gobierno nacional la condecoró con las preseas Al Mérito en el grado de Gran Oficial, en 1956; Gran Caballero y Salud Pública, en 1971; y a petición de la Junta Central de la Cruz Roja Ecuatoriana, con la Medalla de Servicios, en 1959.
En 1968 su nombre trascendió los linderos patrios y recibió conceptuosos acuerdos por parte de organizaciones feministas internacionales, cuando fue candidatizada a “Mujer de las Américas” por el Primer Congreso de la Mujer Ecuatoriana.
A los 84 años de edad, dejando una indestructible estela con el ejemplo de toda una vida dedicada a la reivindicación femenina, la señora Matilde Hidalgo de Procel falleció en la ciudad de Guayaquil el 20 de febrero de 1974.

Autor: Efrén Avilés Pino
Miembro de la Academia Nacional de Historia del Ecuador